miércoles, 24 de octubre de 2012

Persuadir y seducir

Persuadir es convencer a alguien de que está haciendo lo correcto. Seducir implica mover el deseo, más no el convencimiento.

La publicidad subliminal utiliza ambos conceptos, dependiendo del producto, del público objetivo, del sector u objetivos. En la vida práctica la seducción es algo más innato, como una especie de sex apple que pueden tener o no las personas.

Pero el arte de la sugestión es diferente, a las personas se les programa por diversos métodos para que hagan la voluntad de otro, o simplemente para que adquiera conductas respecto a intereses externos o comunes. El hipnotismo o la programacion mental son algunos de sus métodos.

Mientras más factores de éxito vayas sumando, tu poder en todos los sentidos irá aumentando. Es solo cuestión de buscar la forma como debes llegar. La publicidad subliminal se encuentra en todos los lugares, tu puedes aprender de ella en lugar de que siempre te utilice a ti.

Hoy, la publicidad subliminal es muy agresiva. Muchos mensajes se basan en la apariencia del cuerpo, en figuras de contenido sexual, que el subconciente identifica y relaciona con con el producto. Inclusive se, encuentran en la música con frases entre los sonidos de la música.

La sugestión, seducción y persuación, pueden jugar a nuestro favor. Si ello ocurre de dicha manera. ¿Existe la posibilidad de que nos vaya mal?

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